Micro del día 19 de julio emitido por Radio 10 - 102.1:

Bernabé Tolosa: Vamos a conversar un rato con los amigos del Centro de Ingenieros de Mar del Plata. Nos habían solicitado, a través de algunos mensajes, hablar con algún ingeniero electrónico sobre los avances  tecnológicos, ya que la tecnología hoy nos rodea, desde el trabajo hasta el uso personal. Así, tenemos que  agradecer la visita del ingeniero electrónico Walter Gregoracci, con quien vamos a hablar de este tema, primero aclarando algunos conceptos y después ver cómo influyen en la vida diaria, internet, las computadoras, los teléfonos celulares, entre otros avances tecnológicos. Walter, bienvenido.

Walter Gregoracci: No, gracias a Uds por invitarme.

BT: ¿Cuál es la diferencia entre software y hardware?

WG: Básicamente, hardware es todo aquel equipo que tiene un componente  electrónico. Una computadora o un teléfono de por sí es hardware, y dentro de él está lo que llamamos software. El software es ese conjunto de programas y datos que hace que ese hardware realice algún tipo de tarea, o se comporte de alguna manera determinada, una computadora hace lo que tiene que hacer una computadora y un  teléfono lo que tiene que hacer un teléfono.

BT: O sea que hardware  sería el todo físico y el software sería lo que desde adentro hace que eso funcione como tal.

WG: Exactamente, definiéndolos a  grandes  rasgos.

BT: Hoy, los sistemas de programación de software son más complejos que hace años. Uno se acuerda del D.O.S., aquellas cosas que ya hoy en día están obsoletas.

WG: Si, por supuesto y esto viene avanzando cada  vez más rápido. Hoy, cuando hablamos de software, ya hay tres  grandes separaciones, por llamarlo de alguna manera, relacionadas con lo que tiene que ver con el software de sistemas, que son los sistemas operativos, el famoso DOS, Windows y Linux. Los sistemas  operativos son básicamente un software que lo que hace es independizar al usuario del hardware donde está corriendo. Es decir, yo no me preocupo demasiado de qué circuitos o qué cosas tienen por debajo, pero sé que tengo un sistema que si le conecto una impresora y tengo además otro software, que se llama  software de aplicación, como puede  ser un programa de edición de texto, cuando aprieto la tecla “imprimir”, por esas cosas de la vida, imprime. Eso lo maneja todo el software de ese sistema operativo.
Y después, dentro de esos grandes rubros de software podemos hablar de lo que son las herramientas de programación, que es el software que se  utiliza para desarrollar programas.

BT: Y se trabaja bajo licencias, por ejemplo, como los  medicamentos? ¿o es  en forma libre?

WG: Hay dos grandes tendencias en lo que se trata de software, software  libre y software licenciado. Básicamente la  diferencia principal radica en que el software libre da la posibilidad al usuario de  modificarlo,  comercializarlo,  distribuirlo, aprender sobre él y el software licenciado no. Es algo cerrado sobre lo cual no se puede trabajar.

BT: Los licenciados son los que se van actualizando, por ejemplo, Windows. Año a año va sacando algo nuevo, sumándole algo nuevo, sin que el usuario pueda intervenir entonces.

WG: Exactamente.

BT: ¿Dónde encontramos software hoy en día, en nuestra vida cotidiana?

WG: En muchísimos lados y en muchos más de los que a veces nos podemos imaginar, desde el programa que usamos  en la computadora, pasando por un sistema de control de stock de una fábrica, los juegos que usan los chicos si están conectados en red e internet, hasta aplicaciones en los teléfonos móviles. La mayoría tenemos teléfonos que tienen un programita que permite sacar una foto, eso tiene un software  adentro. Electrodomésticos que los puedo programar para que a una determinada hora se  enciendan. Un auto, tiene una computadora a abordo, que  además de mostrar los litros de combustible que llevo consumidos o los kilómetros que voy recorriendo o la velocidad promedio, mantiene el control de la inyección del combustible, todo se maneja a través de un software que está dentro de una computadora, de un hardware específico que maneja todo ese tipo de sensores.

BT: ¿Cómo estamos en la Argentina, Walter, en cuanto  a la producción de software? ¿Somos un país que se considere productor de software?, ¿se trabaja sobre esto o  se trae todo de afuera?

WG: Lo que hace al tema desarrollo de software, Argentina desde hace años está teniendo un crecimiento importantísimo. Si hablamos de los años 2002, 2003, donde había una ocupación de aproximadamente unos 20.000 puestos de trabajo, las proyecciones que tenemos en 2012, muestran que vamos a llegar a 70.000 puestos de trabajo y el crecimiento de la facturación y demás, ha sido enorme. Todavía estamos, a lo mejor, lejos  de  países  que producen en forma mucho más industrializada, pero Argentina ha tenido  un crecimiento muy  grande. Uno de los principales problemas por los cuales no se puede  llegar a crecer más es la escasez de recursos humanos calificados. Es decir, todavía en la Argentina la gente no estudia carreras tecnológicas, en eso tenemos un déficit importante.

BT: Pero hay carreras como para meterse en el tema. Lo cierto es que no se engancha la gente todavía, ¿qué extraño no?.

WG: Si, es así. Yo he participado de distintas asociaciones de tecnología, inclusive en Mar del Plata tenemos una que hace  varios años que se ha conformado, que se llama ATICMA y se han hecho muchos estudios con cámaras de interior y demás y vemos que los chicos usan la tecnología, viven con el teléfono celular, viven con la computadora y pareciera  ser que no quieren ser parte de ella. No se entiende por qué entonces no dedicarse a crear esta  tecnología, a construir sobre esto y a vivir de esto. Mar del Plata, particularmente, tiene una cantidad de emprendimientos, microemprendimientos, empresas pequeñas y medianas. De empresas medianas, podemos hablar de unas 30 que hoy están desarrollando software y vendiendo al exterior y más de 200 microemprendimientos, que son estudiantes e ingenieros, que se asocian entre dos, tres o cuatro personas y desarrollan, inclusive, software para el exterior.

BT: Vamos a seguir hablando acerca de la influencia de la tecnología en la vida cotidiana, la cuestión del celular, de programar la radio o el TV para que despierte a la mañana, y hasta el microondas que tiene un software de por medio, que alguien prepara para que cumpla esa función y sobre todo, la cuestión de las memorias. A mi me sorprende la cantidad de información que puede entrar en un pendrive, en un teléfono, en algo cada  vez más  chico. Así que en un ratito vamos a estar hablando de esto por era uno de los pedidos que nos habían hecho.
Le vamos a dar la bienvenida a Carlos Filippini, que se acaba de sumar. Carlos, bienvenido, gracias por haber venido también. ¿Cómo anda todo?

Carlos  Filippini: Bien, muy bien, aunque hoy atrasado.

BT: No hay problema, estamos con buena compañía, conversando de tecnología.

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BT: Seguimos conversando aquí con los amigos del Centro de Ingenieros de la Ciudad de Mar del Plata, Carlos,  se viene el Congreso Argentino de Ingeniería, estamos cada  vez más cerquita ya.

CF: Si, nos queda poco tiempo, como que el 8, 9 y 10 de agosto está a la vuelta de la esquina. Así que esperamos que llegue el tiempo y que podamos cubrir las expectativas. Interesantes por que, para aquellos que no nos han escuchado, es la continuación de los congresos de ingeniería, tomados desde la óptica  de la universidad, esta vez un poco más abierto, lo que da oportunidades a otro tipo de expresiones. Veremos qué tal las ponencias, que  tal lo que se puede hacer, qué tal lo que la sociedad comienza a reclamarle a las facultades de ingeniería, porque de alguna manera, el ámbito de la Universidad es el generador de las personas que terminan integrándose a la sociedad volcando la ingeniería al servicio de todos.

BT: Claro, la utilidad de la ingeniería. Casualmente de eso hablábamos con Walter, en el marco de lo que nos rodea en forma diaria, desde el horno de microondas, la TV, la radio, el teléfono celular, la computadora, hoy pasa todo por ahí, es increíble el grado de influencia que tiene la tecnología en nosotros.

CB: Y en el ámbito de la Universidad, lo que yo recién decía, tiene que ver con que esto avance en el sentido positivo para la sociedad, así que me parece que  lo que podemos hacer es dejarlo a Walter que siga hablando, por que a la gente le va a interesar todo lo que le pueda aportar él, más que lo nuestro.

BT: Bien. Walter, ¿cómo ven ustedes esto desde adentro, la dependencia que se ha generado en esto?

WG: No solo la dependencia sino el avance, toda la conectividad que hoy tenemos, ya no solo a nivel de producto sino a nivel de empresa, a nivel economía en general. Estamos trascurriendo una etapa de transición,  así como pasamos en algún momento de la  era  agrícola a la era industrial, hoy estamos haciendo una transición entre lo que  es la  economía industrial y la economía del conocimiento, donde empiezan a cambiar una cantidad importante de paradigmas, empiezan a aparecer nuevos conceptos que nos van cambiando y cambiando muy rápidamente. En la época de la transición de la era agrícola a la industrial fue todo mucho más lento. Esto tiene una vertiginosidad  terrible por la propia tecnología que hace que cada vez se avance más rápido.

BT: ¿Qué  significa este concepto de  “economía interconectada”?, ¿Qué encierra?

WG: Encierra todo lo que tiene que ver con las empresas que ya empieza a perder el sentido de gran corporación y empiezan a externalizar funciones. Entonces, por ejemplo, una gran empresa que todos conocemos que produce zapatillas, si la vamos a estudiar veremos que es un estudio de diseño y toda la parte de producción son distintas empresas que fabrican cosas y que hoy pueden hacerlo en función de la tecnología que tienen y los sistemas, que le permiten desarrollar, diseñar, interconectarse, mandar información, intercambiar datos y tomar decisiones, estando en distintas partes del mundo. Esto nos lleva a lo que tanto hablamos, o escuchamos por ahí, el proceso de la globalización. La  globalización es eso. Yo puedo producir algo hoy, en mi casa, hablando de las micro y pequeñas empresas que producen software, alguien puede desarrollar un software en el garage de su casa y estar comercializándolo en Europa.

BT: Claro, y por ejemplo, lo que es You Tube y ese tipo de lugares  tan reconocidos comenzaron así, un grupo de pibes que se juntaban en algún lado y generaban algo. Bueno, el propio Gates hizo algo similar, ¿no?

WG: Exactamente. Obvio que todos estos casos que uno ve, de estos sitios más renombrados, son los que tuvieron éxito pero hay muchísimas de estas cosas que no sobresalen, por que no tienen un éxito tan rotundo, pero en sí, influyen en la economía y van generando puestos de trabajo.

BT: Uno que comienza con una pyme, ya no solo  tiene que ocuparse  de lo que produce, el fruto de la pyme, sino también tiene que saber de publicidad, de tener una página en internet y más, tiene que empezar a  incursionar en otras cosas que no se piensan en un primer  momento.

WG: Si, y de cuidarse que lo que hace no es para siempre, como era hace muchos años atrás, siempre puede aparecer una aplicación o un sistema que va a dar por tierra por todo ese trabajo de, a lo mejor, varios años. Por ejemplo, acostumbrábamos alquilar películas en un video club, hoy se alquilan a través de  internet. De hecho, y lo podemos nombrar por que ya no está más, Blockbuster quiebra en Estados Unidos a manos de una empresa que empieza  a alquilar videos por internet.

BT: ¿Alguna vez te preguntas hasta dónde se puede llegar?

WG: Si, es impensado.

BT: Porque el avance es algo minuto a minuto.

WG: Si, no se puede detener.

CF: Un comentario que me parece oportuno. Estamos mentalizados para el cambio, te aseguro que desde la ingeniería estamos mentalizados parea el cambio. Yo soy ingeniero en sistemas, a pesar que mi título dice “Ingeniero Electricista” de varias décadas para atrás, de la época donde todavía tener una calculadora era una herramienta de lujo. No me ha provocado ningún tipo de crisis el crecimiento y supongo  que lo mismo le pasa a los grupos de trabajo que se van a generando ahora. Y creo que de esto Walter puede dar fe.

WG: Es así, obviamente. De hecho, estamos acostumbrados y tenemos la gimnasia suficiente como para ir adaptándonos. Es el gran desafío.

BT: ¿Sigue siendo caro estar actualizado, mantenerse actualizado en avances tecnológicos?

WG: Y hay épocas de acuerdo a los ciclos económicos del país, pero medianamente hoy está al alcance de la mano. Depende en el rubro en el que se incursione. O sea, si uno quiere, desarrolla un determinado producto, luego hay que fabricarlo y hay que hacer una determinada inversión. Si uno se aboca a tareas de desarrollo de software específico simplemente necesita tener algunas licencias de software y una buena conexión a Internet.

BT: Hoy ¿qué es lo último de lo que se habla en cuanto a avance? ¿pasa por la capacidad de memoria?, ¿pasa por la capacidad de reacción del aparato?, ¿pasa por lo que pueda hacer o a la cantidad de funciones que pueda tener un aparato?

WG: Pasa más que nada por la creatividad del cerebro humano, y ese es uno de los cambios importantes de esta nueva economía, donde los activos pasan por la intelectualidad. Quien es más creativo, quien es más rápido que la competencia es quien está hoy mejor posicionado. No necesariamente necesitas invertir demasiado dinero para tener un proyecto exitoso, pasa más por otros aspectos. Y esto justamente es lo que hace que se desequilibre un poquito todo el tema de paradigmas de la economía anterior, porque la economía tradicional está basada en poderes económicos, en grandes inversiones. Hoy cualquiera puede hacer frente a cualquiera con estas herramientas.

BT: ¿Ahora, qué es esto de la Internet de las cosas?

W: Esto es algo sorprendente que cada vez se empieza a escucharse más. Es pensar que mi auto me avise que tengo que salir 10 minutos antes a la mañana porque no tengo nafta y tengo que pasar a cargar combustible por la estación de servicio. O sea, todas las cosas y todos los productos empiezan a tener software y cada vez empiezan a estar más conectados a Internet. Habrás oído hablar que hace un par de años atrás hubo toda una movida con el cambio de direcciones IP, del protocolo IP6 que da más direcciones IP para poder tener cada vez más productos conectados. Y como todo empieza a tener software y como todo empieza a tener conectividad, no es muy loco pensar que yo tenga un sistema de software que gestione la información del tanque  de nafta del auto y que cuando detecte que a la mañana tengo que  cargar combustible, me programe el despertador 10 minutos antes para que yo lo pueda hacer.

BT: Hace poco moría Bradbury y muchas de estas cosas fueron planteadas ya en su época, en el apogeo de la ciencia ficción, que uno hoy lo ve hecho realidad en muchas las cosas.  Aquel teléfono de Dick Tracy en el reloj que se veía hace años, hoy ya no es ninguna novedad.

WG: Tenés un televisor en el reloj.

BT: Ahora, tampoco podía dejar de pensar en que también estamos más controlados.

WG: Por supuesto.

BT: Estamos vigilados, controlados mejor dicho, por todo lo que nos rodea. Nos ubican mucho más fácil, saben dónde estamos, saben qué dijimos, saben qué hicimos, qué compramos, y esto no solo por una cuestión de control, sino también de ventas. Por lo que uno busca en Internet, se sabe que publicidad, que propagandas mandar.

WG: Si, pero también por las redes sociales hoy podemos tener una mayor participación y decir cosas que antes nunca podían haber salido al conocimiento público.

BT: En eso se notó bastante lo que podía llegar a ser una red social fuera del sistema. Como todo, hay bueno y hay malo.

WG: Exactamente. Todo depende de cómo se lo use.

BT:¿Hoy los chicos aprenden más rápido con Internet?
 
WG: Yo creo que tienen la posibilidad de tener una aprendizaje enorme, también tiene que adaptarse todo el sistema educativo a estos cambios.
Antes, nosotros íbamos a hacer una investigación a la biblioteca. Hoy todos buscan en Internet y allí hay de todo, hay que empezar a evaluar en forma diferente. Alguien que pueda cortar y pegar cosas de Internet, y hoy lo puede hacer cualquiera, puede presentar un trabajo que a lo mejor no tiene un sustento importante porque vaya a saber de dónde sacar la información. Por eso hay que empezar a instruir, y a poder calificar otras cuestiones.

BT: ¿Qué deberían hacer las facultades o las escuelas para atrapar a más gente en este tipo de carreras, que decías que es algo que está faltando?

WG: Se está trabajando bastante, hay distintas asociaciones del país en esto. Y creo que hay que trabajar mucho, pero mucho, sobre la difusión de este tipo de carreras. Hay preconceptos en los chicos con las carreras de ingeniería, que son carreras duras, que son para Nerds, gente que tiene que estar permanentemente metido dentro del cuarto estudiando. Creo que no es así, creo que hay que dar un poco más de difusión y mostrar que en realidad así se empieza a dar la libertad de crear y permitir a cada uno hacer su propio futuro.

BT: Carlos, fuiste el primer Concejal que utilizaste en su momento una notebook en el Concejo Deliberante. También había cierta vergüenza en eso, no?

CF: Vos sabes que da la impresión que sí. El otro día, cuando tuve la oportunidad de participar de la última sesión del Concejo Deliberante, en la bienvenida que algunos colegas me dieron por conocernos mucho, hubo una concejal que expresó, literalmente “volvió la tecnología al Concejo Deliberante”, porque realmente es una herramienta que muy pocos usan. Recordarás, yo nunca usé papeles.

BT: Si, si.

CF: Respecto al tema de lo que decíamos de la educación, a mí me parece fascinante el hecho de las oportunidades que da la Educación continúa. Me  pasa en lo chiquito, por ejemplo, cuando estoy en mi casa generalmente estoy conectado y me suele pasar, en charla con mis hijos, que salga algún tema determinado. Automáticamente uno lo busca en Internet y continúa la charla a partir de haber construido nuevos conceptos en ese momento. Lo cual, te da una capacidad de crecimiento que antes no teníamos, porque como decía Walter, uno tenía que ir a la biblioteca o si tenía suerte y medios, podía disponer de una biblioteca propia, demorando en el tiempo esa oportunidad de captar el conocimiento.

BT: Si. Está bien que hoy la información circula, casualmente el cambio que se ha dado o que se tiene que dar más fuertemente en la educación es que ya no te dan información, sino que la información circula, lo  que le tienen que enseñar es cómo utilizar esa información, como entenderla. Pero el tema pasa por ahí, sin duda ha generado, inclusive en las relaciones humanas.

CF: Te cierro el concepto de lo que estaba diciendo. Lo que no te aclaré es que alguno de mis hijos esta acá y otro está a 10 mil kilómetros de distancia, y estamos los tres charlando, por supuesto cada uno con una computadora, sentados, conectados, como  que estuviéramos sin vernos en el mismo lugar.

BT: Si, se repite y  se repite. Inclusive en el trabajo, en el propio Gobierno ¿no? increíble. Bueno, Walter, seguramente vamos a volver a invitarte porque es un tema que da para hablar largo y tendido. Además ha sido uno de los pedidos que nos han hecho los oyentes.
CF: Vamos a comprometerlo porque tiene mucho para mostrarle a la sociedad. Yo sé que le cuesta mucho trabajo porque no tiene tiempo. A los ingenieros que están a cargo de grupos de trabajo y que asumen responsabilidades sociales les cuesta invertir parte de su tiempo en esto, pero necesitamos darle divulgación.
 
BT: Lo vamos a comprometer al aire ya que hasta vino temprano. La verdad que no podemos decir nada.

WG: Es un defecto de los ingenieros.

BT: Muchísimas gracias por haber venido.

WG: No, a ustedes.

Fm 102.1 - Radio 10 Mar de Plata - “MDP AM”
19 de Julio de 2012 - 14:05
Nota con el Ing. WALTER GREGORACCI
Ingeniero electrónico